Una reorganización del Equipo de calle ha motivado que Puri y yo dejemos de recorrer la zona donde durante varios años nos hemos movido haciendo la calle.
Ya no iremos a la Plaza de la Sagrada Familia, ni nos mezclaremos entre la gente que todos los días espera a que puntualmente se abra la puerta metálica del colegio para dar «un trozo de pan con algo» a todo aquel que allí se acerca.